Deléitate en el Señor, y él te concederá
Los deseos de tu corazón.
Salmos 37:4
Todos en alguna vez hemos hablado o nos hemos propuesto un proyecto, de trabajo, de estudio, de viaje… El termino proyecto proviene del latín proiectus y tiene diversos significados, se puede definir como el conjunto de actividades coordinadas e interrelacionadas, que buscan cumplir con un objetivo especifico, en un tiempo determinado. Cuando estamos a las puertas del comienzo de un nuevo año, se hace necesario elaborar un proyecto de vida, solo así sabemos para donde vamos y podemos evaluar nuestros logros.
Creo que un buen proyecto de vida, debe incluir cuatro áreas:
La primera es el área Espiritual. El salmista en la primera parte del texto dice: deléitate en el señor… lo que indica tener una relación personal, agradable y deleitosa. Hoy por hoy encontramos a muchos que no tienen en cuenta a Dios en sus planes, en sus proyectos, por tanto pueden ser muy exitosos en las otras áreas, pero su vida espiritual esta arruina, y son grandes empresarios, deportistas, artistas… pero esclavos de los vicios y del pecado.
La segunda área es la familiar. Se hace necesario hacer planes en relación a nuestra familia, proponernos mejorar la relación de padres e hijos, entre esposo, haciendo todo para ser mejores esposos, esposas, e hijos, y así poder hacer de nuestro hogar el lugar más agradable y disfrutar de la felicidad.
El área económico-laboral, debe hacer parte de nuestro proyecto, creo que todos anhelamos un mejor sueldo, esto nos lleva a hacer mejores trabajadores, proyectar nuestros negocios, y alcanzar así nuestras metas económicas.
La cuarta área es la académica. Todos debemos estar en un constante aprendizaje, sin importar la edad, el nivel de escolaridad, ni la capacidad económica, vivimos en la época del conocimiento, hoy es fácil aprender: un arte, un idioma, culinaria, una carrera universitaria, por la internet, institutos, universidades. ¡Todos debemos crecer en el conocimiento!
El salmista dice: deléitate así mismo en Jehová y el te concederá los deseos de tu corazón, Dios puede conceder tus proyectos, pero es necesario que le busques de todo corazón, que él sea parte fundamental de tus planes, proyectos.
Una pregunta para reflexionar. ¿Esta Dios en tu proyecto de vida?
Haga una oración ahora mismo, señor Jesús, de hoy en adelante quiero que estés en mis planes económicos, familiares y académicos, ayúdame a alcanzar mis sueños y metas en tu nombre Jesús amen.
Recuerda: “No seas vencido de lo malo, mas vence con el bien el mal”
Anilio Moreno
Pastor
Diciembre 30 de 2010
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